En un mundo donde el consumo es constante y las tentaciones están a la orden del día, enseñar a los niños a ahorrar puede parecer una tarea titánica. Sin embargo, inculcar esta valiosa habilidad no solo les ayudará a manejar sus finanzas en el futuro, sino también a tener una mejor calidad de vida y los recursos necesarios para lograr sus objetivos.

Además, les permite desarrollar una mentalidad de planificación que es esencial para tomar decisiones más acertadas. Este acto también les enseña la importancia de ser pacientes para obtener lo que desean.


Esto les permite desarrollar una relación saludable con el dinero

Técnicas para cultivar el ahorro en los niños

Los niños aprenden mucho observando a los adultos, especialmente a sus padres, quienes al practicar hábitos de ahorro y una actitud responsable hacia el dinero, es más probable que los más pequeños los adopten. Por ejemplo, pueden destinar una parte de sus ingresos y explicarles a sus hijos por qué lo hacen y para qué servirán esos ahorros.

En ese sentido es importante ayudar a los niños a definir objetivos concretos puede motivarlos a ahorrar. Estas metas pueden ser a corto y mediano plazo, como comprar dulces, o a largo plazo, como adquirir un juguete.

También es esencial ayudarles a definir un lugar físico, como una alcancía, o habilitarles una cuenta bancaria para depositar el dinero ahorrado, ya que puede hacer más tangible este proceso, lo cual les ofrece una oportunidad para aprender sobre el funcionamiento de los bancos y los intereses.


También contribuyen en la formación de una sociedad más consciente y responsable

Recompensarlos por sus esfuerzos es un gran incentivo. Esto no significa necesariamente darles más dinero, sino reconocer su constancia y disciplina. Puede ser con palabras de aliento, pequeñas recompensas no monetarias, o incluso una pequeña cantidad de dinero adicional por haber alcanzado su objetivo de ahorro.

Dar a los niños una mesada regular es una excelente manera de enseñarles a gestionar dinero. Es importante que tengan la libertad de gastar o ahorrar según sus propios deseos, ya que de esta manera aprenderán de sus errores y éxitos.

Cabe destacar que este proceso se puede fomentar de forma lúdica, ya que algunos juegos de mesa como Monopoly o aplicaciones educativas específicas para finanzas les facilitan el aprendizaje sobre la gestión del dinero.

A su vez debes explicarles los aspectos básicos del mundo de las finanzas como los gastos, las deudas, la inversión e integrarlos en la economía familiar.

Para lograr tener éxito en esta etapa es crucial que ellos comprendan la diferencia entre lo que necesitan y lo que desean. Este entendimiento les ayudará a tomar decisiones financieras más inteligentes.