
Nacida el 3 de abril de 1934 en la ciudad Londres, Inglaterra, los hallazgos de Goodall revolucionaron la primatología, revelando que los chimpancés poseen la capacidad de usar herramientas, practican la caza para obtener carne y exhiben comportamientos sociales complejos que solo se le atribuían a los seres humanos.
Según un artículo de National Geographic, Goodall no estudió en la universidad. Sin embargo, durante la Segunda Guerra Mundial se matriculó en una escuela de secretariado y se graduó en 1952.
Su deseo de vivir en África siempre se mantuvo latente y en 1957 viajó a Kenia, a la granja familiar de una compañera de clase que la había invitado a conocer el lugar. En esta nación conoció a Louis Leakey, un paleoantropólogo que casualmente buscaba a alguien para estudiar a los chimpancés.
Jane Goodall contrajo matrimonio en dos ocasiones, la primera en 1964 con el barón holandés Hugo van Lawick, un fotógrafo de vida salvaje que trabajaba para National Geographic y fue el responsable de capturar muchas de las imágenes más icónicas de Jane en Gombe. De esta unión nació su único hijo, Hugo Eric Louis van Lawick (nacido en 1967), apodado cariñosamente «Grub». La pareja se divorció en 1974.
Un año más tarde, Goodall se casó por segunda vez con el político británico Derek Bryceson, quien en aquel momento era el director de los Parques Nacionales de Tanzania y miembro del Parlamento de ese país.
Compromiso con la conservación
En 1965 inauguró el Centro de Investigación Gombe Stream, para educar a las nuevas generaciones interesadas en la investigación de primates.
A mediados de la década de 1980, Goodall abandonó gran parte de su trabajo de campo para dedicarse a la conservación y el activismo a tiempo completo. Se dio cuenta de que si no actuaba, el hábitat de los chimpancés y muchas otras especies desaparecería.
Para 1977 fundó el Instituto Jane Goodall (IJG) que apoya la investigación continúa en Gombe y, más importante, desarrolla programas holísticos de conservación que reconocen la interdependencia entre la salud del planeta, los animales y las comunidades humanas.

En 1991, lanza el programa global Roots & Shoots (Raíces y Brotes), para instruir en educación ambiental y humanitaria a jóvenes de todas las edades y llevar a cabo proyectos positivos en sus comunidades. Este es considerado uno de sus legados más importantes para el futuro.
Obras destacadas
