Red flags cuando conoces a alguien

Las “banderas rojas” son señales de alerta que no debemos ignorar y que indican que debes alejarte de esa persona una vez presencia las siguientes acciones, o al menos, intenta explorar más estos puntos porque podrían tener un mal pronóstico para ti y tu estabilidad afectiva.

Podrías tratar de una persona controladora si pide detalles de cada paso que das, con quienes te relacionas cada día, diciéndote cómo debes actuar en una determinada situación sin escuchar tu opinión, menospreciando tu criterio, intentando revisar tu teléfono y hasta incluyéndote demasiado rápido en tu día a día. Hay personas controladoras que se autoinvitan a vivir contigo y no te da tiempo de decidir si quieres o no dar ese paso. Básicamente, deciden por ti, aunque sean espléndidas contigo, pero de alguna manera te están anulando como persona.

¿Qué quieres tú? ¿acaso no importa?

También podrías cruzarte con una persona con poca empatía. Algunas “banderas rojas” podrían ser: no está pendiente de ti, sólo te busca cuando tiene un interés claro y puede desaparecer algunos días y luego reaparecer como si nada. No da explicaciones ni pide disculpas porque realmente no cree que esté mal el contacto intermitente. Si le dices que eso te incomoda, invalida tu emoción y te pide que dejes la intensidad. Además, podrías encontrarte con una persona con baja autoestima, y ​​aunque es difícil detectarlo, te dejo algunas “banderas rojas” a explorar: te ama muy rápido y quiere estar contigo todo el tiempo, al punto de generar un poco de asfixia. Lo hace desde la entrega romántica pero no te deja opción aparente. No quiere hacer nada si no es contigo y se incomoda si tu si lo haces. No quieres herir sus sentimientos y entonces permite lo que no quieres permitir: la dependencia emocional.

Identificarlas a tiempo es crucial para evitar relaciones tóxicas

Peor aún si te encuentras con una persona agresiva, aunque rara vez lo será contigo al principio (sí podría ocurrir que sobre-reaccione ante algo que le moleste de ti), pero más fácil será detectarlo con el trato que le dé a otras personas aun estando tú presente, por ejemplo, al mesonero, parquero, taxista o hasta a su mamá: ¿cómo les habla? ¿Cómo los trata cuando algo le molesta o cuando piensan diferente? Eso dirá mucho sobre su agresividad o tolerancia. Y créeme, no querrás tener una relación con una persona agresiva que luego depositará todo eso en ti.

Y también están las personas egocéntricas que agotan a cualquiera. Las “banderas rojas” son el “yo, yo, yo” al hablar, porque básicamente, no les importa tu opinión, gustos, cómo estuvo tu día, cómo te sientes, qué haces en tu trabajo o quién es tu familia. Ten en cuenta que ese egocentrismo no suele ir a menos, sino que podría tratarse de una personalidad narcisista. Podría ser una persona muy amable y tener gestos muy románticos, pero que no muestra interés real en ti.

Quien no quiere compromiso también podría aparecer y es fácil de verlo porque no establece conversaciones muy profundas que involucren sentimientos, no habla de sus planos personales en el ámbito afectivo, y, además, suele solicitar que no se pongan etiquetas de noviazgo ni se conozcan a la familia y amigos. Su lema es “dejemos que fluya y ya se verá” y esto puede ser durante varios meses.

Finalmente, mucho cuidado con la persona que no ha vivido su duelo y no deja de hablar de su ex, bien o mal. O con la persona celosa e insegura que no deja de investigar todo lo que pueda de tus ex parejas. Y si es muy tarde porque no reaccionaste ante las “banderas rojas” pide una cita y lo conversamos a profundidad.

Clínica de la Pareja:  @clinipareja www.clinipareja.com

Estampas recomienda