¿Y si la felicidad fuera más que sonreír o tener una vida perfecta?

Para muchos de nosotros, ser felices siempre ha sido un propósito de vida. Desde pequeños empezamos a pensar que íbamos a ser felices cuando terminamos el colegio, o cuando nos graduamos en la universidad, o cuando nos casamos o cuando conseguíamos ese trabajo que tanto soñábamos,…, pero lo cierto es que pasan los días, y aunque conseguimos las cosas que queríamos, probablemente sentimos que aún no somos felices.

Con el paso del tiempo empecé a reflexionar acerca de qué significaba para mí la felicidad, y aunque figuras como Aristóteles, Albert Einstein, Simone De Beauvoir, entre otros, tenían enfoques muy interesantes sobre este tema, yo sentía que necesitaba algo más. Y fue en ese momento cuando por esas casualidades, que siempre pensé que no son tan casuales, me llegó un video del Dr. Tal Ben Shahar, conocido como el “Gurú de la Felicidad”, acerca de qué es la verdadera felicidad. Comencé a leer sus escritos, ver sus videos y conferencias, y me decidí a empezar a estudiar con él que era la felicidad, y allí comprendí lo que realmente significa para mí la verdadera felicidad.

Ben Shahar en su modelo de la felicidad, conocido como SPIRE nos invita no sólo a ampliar nuestra percepción de lo que es realmente la felicidad, sino también a controlar nuestro estrés, a fortalecer nuestra amabilidad y enfrentar la incertidumbre con una mente clara, abierta y en paz.

Él nos propone una visión más completa y realista de la verdadera felicidad: el bienestar integral. No se trata solo de buscar momentos felices, sino de cuidar cinco dimensiones clave de nuestra vida: lo espiritual, lo físico, lo intelectual, lo relacional y lo emocional.

Desde encontrar y sentido (espiritual), cuidar el cuerpo (físico), nutrir la mente con creatividad y curiosidad (intelectual), fortalecer nuestras relaciones (relacional), hasta gestionar las emociones con amabilidad (emocional), su enfoque nos invita a construir una felicidad más profunda, amplia y sostenible.

La clave de la felicidad está en el equilibrio de todos los aspectos que son parte de nuestra vida. No se trata de hacerlo todo perfecto, sino de dar pequeños pasos conscientes cada día. Leer algo que nos inspire, caminar al aire libre, compartir una buena conversación o simplemente respirar con atención plena pueden ser prácticas para fortalecer y cuidar nuestra felicidad y/o bienestar.

En su modelo de la felicidad, conocido como SPIRE , Ben Shahar nos invita no sólo a ampliar nuestra percepción sino a comprender que “la felicidad no es un destino, sino una forma de vivir”. Y siempre tenemos la oportunidad de elegir cómo fortalecerla.

La felicidad no es algo reservado para unos pocos afortunados, sino más bien una posibilidad real que tenemos disponible cada uno de nosotros en nuestras decisiones cotidianas. Y para finalizar te pregunto, y TU, ¿Qué pequeño acto vas a hacer hoy para cultivarla?

Nos vemos en nuestros próximos artículos para continuar cuidando y atendiendo nuestra felicidad.

Zoramar Oviedo Gallo

Consultora de Felicidad y Bienestar

Entrenador de felicidad

Psicóloga Corporativa y Social

Prof. Invitada IESA. Profesor UNIMET

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