Al recorrer Venezuela nos encontramos con destinos que embriagan con su belleza natural, como La Cascada del Vino, una caída de agua de más de 90 metros de altura, que se ubica en el Parque Nacional Dinira, en el municipio Morán del estado Lara.
Uno de los atributos más destacados de este paraje es la peculiar tonalidad rojiza de sus aguas, que parece destilada de las uvas de los mejores viñedos, lo cual
le da su nombre. Este color se debe a la concentración de ácido tánico y antocianina, compuestos que se desprenden de las raíces de los árboles circundantes y plantas de la zona, la cual se mezcla con el material ferroso de las rocas y tiñe el agua de forma similar al vino.

¿Qué hacer en la Cascada del Vino?
La Cascada del Vino es ideal para los amantes del ecoturismo y la aventura. En su recorrido podrán realizar caminatas y apreciar paisajes de montaña , con una temperatura que oscila entre los 16 y 20 grados centígrados, y una abundante vegetación.
También disfrutar de un baño en las aguas revitalizantes de la cascada o hacer un pícnic en su orilla.

Los alrededores de la cascada, con sus bosques húmedos y la neblina matinal, son perfectos para capturar fotografías espectaculares.
Además de la cascada, los visitantes pueden explorar otros lugares de interés en la zona, como la cueva de La Peonía . Pero si no deseas dormir en carpas, no te preocupes, a 10 minutos en la población de San Pedro se encontrarán unas acogedoras posadas.

¿Cómo llegar a la Cascada del Vino?
A este lugar, que se encuentra cerca del pueblo de Barbacoas, se puede acceder a través de dos rutas:
Desde Barquisimeto: Puedes tomar la carretera Quíbor -El Tocuyo, subiendo por Humocaro Bajo y Humocaro Alto. Es recomendable usar un vehículo rústico debido a las condiciones de la vía.
Desde la carretera Panamericana: Otra opción es ir hacia Trujillo y, a la altura del pueblo de San Pedro, tomar el camino que pasa por La Pastora y Jabón hasta llegar a Barbacoas.