Se pasea entre el pasaje y el joropo recio con gran maestría. El ímpetu, dicción y escena de Emily Galaviz cautivan al público de todas las edades.
«El guayabo zarandiao», del compositor venezolano Carlos Cumarín, es su carta de presentación. Fue grabado originalmente en las voces de otros intérpretes, pero la cadencia y la gallardía que le imprimió la joven Emily Galaviz, hizo que la sacara de jonrón en las redes sociales.
Tras publicar la canción el pasado mes de abril, como parte de un popurrí de música venezolana en su canal Youtube, el tema se viralizó y distintos dj comenzaron a agregarle ‘beats’ de música electrónica. El tema sonó hasta en el festival Tomorrowland, uno de los más importantes encuentros de música electrónica. Así, la cantante oriunda del sur del estado Aragua, gana millones de seguidores en su cuenta @emilygalvizoficial en instagram y Tik Tok.
«De niña, la llamaban “Emily, la coplerita” y para ese entonces participaba en festivales organizados por el espacio televisivo Corazón Llanero, hasta que finalmente se llevó el primer lugar en 2022».
Desde niña, en su natal San Casimiro, afinó su instrumento prodigioso: su voz. Su maestro de música, Rafael Durán, le ayudó a perfeccionar su arte y en una oportunidad le dijo a su mamá de crianza: «Emily ya sabe cantar y canta muy bien, nació con ese don». Ella dice que sí se ha enamorado, pero señala que ahora su prioridad es la música y que sigue enfocada en eso.
Los adultos, los jóvenes y hasta los más pequeños cantan al unísono en sus conciertos «va, va colgando de un hilito, mi corazón, mi corazoncito, busco refugio en otro amorcito…». Pero el camino hacia su crecimiento profesional fue producto de mucho esfuerzo.
«Emily, tú vas a ser grande», así le decía su abuela paterna, la señora María Carballo, cada vez que llegaba a casa afligida porque no obtenía el primer lugar. «Tú vas a ser grande, ‘mijita’, quédate tranquila. Ojalá yo esté viva cuando eso suceda».
«Lamentablemente mi abuela falleció, pero cuando gané el festival en la TV, canté un pasaje con mucho sentimiento, recordándola», explica. «Mi fuerte no es ni el recio ni el pasaje, mi fuerte son los dos», remata orgullosa la nueva luminaria de la canta criolla.
Emily Galaviz @emilygalavizoficial
Fotografía @pixelestudiovzla
José Rafael Rodríguez @jotaerremedios