Dieta de la fertilidad: alimentos que favorecen la concepción

Ser padres es un anhelo para muchas parejas. Sin embargo, en algunos casos el sueño de tener un hijo se ve eclipsado por la infertilidad, que afecta física y psicológicamente tanto a hombres como a mujeres, quienes pueden sufrir frustración y angustia emocional.

Esta patología, que pone a prueba la fortaleza de cada miembro de la pareja para mantener su vínculo afectivo, es causada por problemas específicos en cada género. En las mujeres las más comunes pueden enfermedades como la endometriosis, cuando el tejido endometrial que recubre el útero se extiende fuera de este órgano hacia los ovarios y trompas de Falopio formando adherencias y quistes que pueden provocar su mal funcionamiento, las irregularidades ováricas por factores homosexuales, la edad, ya que después de los 40 años la fertilidad disminuye debido al inicio de la menopausia, entre otros factores.

Por otro lado, en el caso de los hombres
las obstrucciones de los conductos por donde pasa el esperma, por causas congénitas o procedimientos médicos, la poca cantidad de espermatozoides en el eyaculado, el varicocele, una dilatación de las venas que drenan el flujo sanguíneo del testículo y la edad, que se estima superior a los 45 años, se posicionan como los principales factores.

Ante esta realidad, muchas parejas suelen someterse a tratamientos quirúrgicos, la terapia hormonal, entre otros para mejorar su fertilidad, pero afortunadamente estos no son los métodos, ya que uno de los más poderosos y accesibles es la adopción de una dieta balanceada que contempla la ingesta de algunos alimentos.

Una de las dietas recomendadas es la mediterránea

Nutrientes que estimulan la fertilidad

Verduras de hoja verde oscuro: Espinaca, col rizada, rúcula, brócoli o acelga, ricas en ácido fólico, hierro y antioxidantes, mejoran la ovulación, regulan el equilibrio hormonal y protegen los óvulos y espermatozoides del estrés oxidativo.

Almendras, nueces, huevos y aguacate: El alto contenido de vitamina E mejora la vitalidad de los espermatozoides, aumenta el flujo sanguíneo a las arterias y engrosa el revestimiento uterino y alivia los dolores menstruales.

El pescado: Su Omega-3 estimula el equilibrio hormonal, el ciclo de ovulación y eleva la producción de espermatozoides. También mitigan el estrés, la ansiedad, mejorando el estado de ánimo.

Las lentejas, frijoles y carnes magras: El zinc que contiene regula los niveles de testosterona, una hormona clave para la producción de esperma, y favorece la maduración y desarrollo de los óvulos.

Los lácteos: Sus nutrientes esenciales como el calcio y la vitamina D mejoran las condiciones del endometrio para la implantación del embrión y la motricidad de los espermatozoides.

Frutas: Se recomiendan aquellas con vitaminas C y B6 como naranja, cambur y fresas, que mejoran la calidad de los óvulos, espermatozoides y los protegen del daño de los radicales libres.

¿Qué no comeré en esta etapa?

Los expertos recomiendan disminuir la ingesta de alimentos procesados, altos en grasas saturadas y azúcares refinados, como la bollería industrial, pescados como el atún, alto en mercurio, cafeína y alcohol que afectan el ciclo reproductivo.

Es importante mantener un peso adecuado, ya que el sobrepeso, eleva el riesgo de tener infertilidad. Por ello es importante realizar actividad física con regularidad. También acude al médico para tener un diagnóstico seguro y un tratamiento adecuado.

Por último, mantenga una buena comunicación y empatía en la relación para superar esta dificultad en pareja.

 

 

Estampas recomienda