La chayota, con su textura tierna pero firme, actúa como un lienzo neutro que absorbe y realza los sabores del aliño. De allí que, con este alimento, puedan prepararse tanto platos salados como dulces. Por estar compuesta por un alto contenido de agua, es dietética y diurética. Se cocina hervida y puede picarse en cuadritos para elaborar ensaladas frías o calientes, o sólo por la mitad y rellenar con guisos de carne, pollo o pescado, así como también gratinar con queso. Pruebe las recetas que presento a continuación y disfrute del fresco sabor de las chayotas.
INGREDIENTES
(6 Personas)
- 4 chayotas grandes
- 1 pimentón verde cortado en cuadritos
- 2 cebollas moradas picadas en cuadritos
- 4 ajíes dulces picados
- 1/2 taza de hojas de cilantro frescas picadas
- 1/2 taza de aceite de oliva
- 1/4 taza de vinagre de vino tinto
- 1 cdta. de sal
- Pimienta negra recién molida
PREPARACIÓN
Pelar las chayotas y picarlas en trocitos. Hervirlas en agua con sal por 20 minutos o hasta que ablanden. Escurrirlas. Picar las cebollas moradas, los ajíes dulces y el pimentón verde en cuadritos.
Unir a las chayotas cocinadas y frías.
Agregar el cilantro picado. Media hora antes de servir, aliñar con el aceite de oliva mezclado con el vinagre de vino, la sal y la pimienta negra recién molida. Aderezar y colocar en una ensaladera.
Servir como acompañante de pollo, carne o pescado.
