INICIO / VIVIR MEJOR / BIENESTAR / Burnout Navideño: cómo disfrutar las fiestas con plenitud

Burnout Navideño: cómo disfrutar las fiestas con plenitud

Mantén una perspectiva realista para no sentirte atrapado

​El fin de año y las festividades navideñas, a pesar de su espíritu de alegría y unión, pueden convertirse en una época de intenso estrés y agotamiento mental, elevando el riesgo de tener  ‘burnout navideño’ que puede tener un impacto significativo en nuestro bienestar.

​Esta sensación no se debe únicamente a los compromisos de trabajo, sino a la sobrecarga de la logística festiva, comprar regalos, asistir o ser anfitrión de múltiples fiestas, planificar las vacaciones, la obligación de gastar más de lo presupuestado genera estrés económico, una de las principales fuentes de malestar. 

​En casos más severos, esta sensación puede manifestarse con síntomas físicos como dolores de cabeza, problemas de sueño, mayor susceptibilidad a infecciones y cambios de humor constantes y repentinos.

Una mente agotada es menos resiliente, más propensa a la irritabilidad y menos capaz de disfrutar genuinamente de los momentos especiales. Proteger nuestra salud emocional es el mejor regalo que podemos darnos. Aquí te revelamos cómo lograrlo.

​Planificación y delegación: no tienes que hacerlo todo. Pide a familiares y amigos que se encarguen de los entrantes, el postre, la decoración o la compra de bebidas. Repartir las responsabilidades es clave para el éxito colectivo.

Prioriza la conexión emocional sobre la perfección en las celebraciones

Haz una lista realistas: enumera lo que realmente necesitas hacer (compras, menús, entre otros compromisos.) y elimina lo no esencial para mantener tu tranquilidad. 

Redefine prioridades y límites: establece un Presupuesto de Regalos Firme: Planifica tu gasto y cíñete estrictamente a él. Esto reducirá la ansiedad post-navideña por las deudas. Considera alternativas como los intercambios de regalos con límites de precio.

Aprende a necir «NO» sin Culpa: tu bienestar es más importante que cualquier compromiso social. Si un evento o tarea te genera un alto nivel de estrés o ya tienes la agenda llena, rechaza amablemente la invitación o la nueva obligación. Prioriza la calidad sobre la cantidad de encuentros.

​Fomenta experiencias: recuerda que el objetivo es fortalecer vínculos y crear recuerdos, no impresionar con objetos o con una cena perfecta.

El Autocuidado no es negociable:  reserva tiempo para el descanso, dar un paseo tranquilo, 20 minutos de lectura o simplemente quedarte en casa sin hacer nada.

Mantén rutinas básicas de sueño: intenta seguir durmiendo al menos 7 horas por noche. El descanso es el pilar para manejar el estrés.

​Practica el mindfulness: cuando te sientas abrumado, detente. Concéntrate en tu respiración: inhala contando hasta 4, retén 4 segundos y exhala lentamente. Esto puede calmar tu sistema nervioso en minutos.

La Navidad debe ser una época de disfrute, no de esfuerzo extenuante. El mayor regalo que puedes dar a los demás y a ti mismo es tu presencia y tu bienestar emocional.

 

Estampas recomienda