La casa de modas Chanel lleno de color nuevamente el Grand Palais de París, durante la presentación de su colección Piravera-Verano 2025 , creada por Matthieu Blazy, en la Semana de la Alta Costura.
El desfile ha sido una oda a la temporada y al legado de la fundadora de la casa de moda francesa, Gabrielle Chanel y que Karl Lagerfeld catapultó en los 90 a estatus de icono. El evento también fue una oportunidad para revelar parte de las tendencias que veremos durante este año.
Sí a los tonos pasteles
La firma no solo ha demostrado nuevamente su talento en al Alta Costura, sino también en el manejo del color al diseñar sus prendas en colores pasteles, un clásico que forma parte de sus códigos, una gama que va desde el verde agua, el amarillo mantequilla, azul suave, el lila, el blanco o el salmón más delicado también que se funden en un mismo diseño, que se ven adornados por detalles florales y elementos que nos remiten a la naturaleza, aportándole la frescura y elegancia de la temporada.
La imponencia del Tweed
Este elemento clásico de Chanel fue el lienzo donde se plasmaron los diseños desde los vestidos, los trajes de dos piezas hasta los pantalones anchos o vestidos, que se ve adornado por pequeños bordados de cristales que hacen alusión a la primavera, así como el resto de las telas que se cubre con pétalos en relieve.
Lo mini llego para quedarse
En esta colección imperan los formatos mini que pueden encontrarse en diferentes prendas como los delicados vestidos de tweed con chaleco por encima y botonadura lateral. El eterno traje de este material también se actualiza y cambia la clásica chaqueta con cuello caja con minifaldas cuyos vivos se tiñen a juego con la camisa. Las bermudas también se traducen en versión mini, como otra versión del conjunto de dos piezas.
Un cinturón negro, el accesorio ideal
Este básico de armario no pasó desapercibido, ya que la firma los incorporó en casi todos los diseños resaltando la silueta femenina. Los vestidos de noche más sofisticados se ciñen a la cintura con un diseño con detalles en dorado, mientras que los trajes se entallan con un complemento más discreto, integrado únicamente por una hebilla también dorada.
Los ‘skousers’, frecura y versatilidad
Son la última tendencia en moda que está causando sensación. Se trata de una combinación innovadora y audaz que fusiona dos prendas aparentemente opuestas: una falda y un pantalón. En esta oportunidad se declinan mediante vestidos ‘babydoll’ que llevan por debajo unas bermudas en el mismo tejido, para un resultado de lo más naíf.
Una novia moderna
Este diseño corto de tono empolvado dice ‘adiós al blanco’ y se nimba con una delicada chaqueta de tweed y un velo en un delicado tul, adornado por un moño como un acento romántico, fue el broche de oro para el cierre de este desfile que muestra la evolución de la moda en el mundo contemporáneo.
