Establecido en 1980 por la Organización Mundial del Turismo (OMT), el Día Mundial del Turismo es un espacio clave para crear conciencia sobre el rol de este sector en el desarrollo socioeconómico de las comunidades y la promoción de la cultura local.
El lema de este año, “Turismo y desarrollo sostenible”, es un llamado para cumplir un objetivo insoslayable que es la práctica del turismo consciente, que no solo permita conocer nuevos destinos, sino que también respete el ambiente.
Una de las características más intrigantes del turismo es su poder para conectar distintas culturas. Cada lugar tiene una narrativa que contar, desde las ricas tradiciones de los pueblos indígenas hasta los desarrollos de las grandes ciudades contemporáneas. Los viajeros pueden experimentar realidades diferentes, enriquecer sus vidas y, a la vez, ayudar a la economía local.

No obstante, este sector también enfrenta retos serios. La concentración de turistas en ciertos lugares ha ocasionado un deterioro ambiental y cultural que pone en riesgo la esencia de estos destinos. Por lo tanto, es crucial que, como viajeros, adoptemos comportamientos responsables, eligiendo alternativas que faciliten la conservación de los espacios como el ecoturismo o el turismo rural.
Por ende, al acercarnos al Día Internacional del Turismo, es importante recordar que cada decisión importa. Al optar por apoyar a pequeños negocios y seleccionar destinos menos conocidos, ayudamos a crear un modelo más justo y sostenible.
Por lo tanto, ya sea que estemos planeando una escapada local o soñando con destinos lejanos, hagámoslo con el compromiso de cuidar y valorar lo que hace a nuestro planeta tan especial.