Esta raza proviene de Cuba y está históricamente asociada con La Habana. Muchos lo consideran el perro nacional de Cuba y tiene una larga historia como mascota en hogares y en la alta sociedad.
Es famoso por su naturaleza cariñosa, juguetona y sociable. Esta raza es muy inteligente, inquisitiva y cuenta con un nivel de energía que va de moderado a alto, manifestándose a través de juegos y exploraciones. Generalmente se lleva bien con niños y otras mascotas si recibe una socialización adecuada desde cachorro.
Normalmente, el perro Bichón Habanero tiene una altura que varía entre 22 y 28 cm y un peso de entre 3 y 6 kg. Su expectativa de vida está entre 14 y 16 años, aunque con cuidados apropiados puede vivir más tiempo. Asimismo, su pelaje largo y sedoso exige cepillado frecuente para evitar enredos y minimizar la formación de esteras.
Higiene facial y dental
Como en numerosas razas pequeñas, el cuidado dental es esencial. Cepillados regulares y chequeos dentales son fundamentales para prevenir problemas bucodentales.
Salud general: Esta raza, por lo general, es saludable, pero puede ser propensa a algunas afecciones como la luxación de rótula, displasia de cadera, infecciones auditivas y problemas dentales si no se les da el cuidado adecuado. Es fundamental realizar consultas veterinarias periódicas y seguir un adecuado programa de vacunación y desparasitación.
Clima y cuidados: Su pelaje y tamaño lo hacen apto para ser un perro de interior y adaptarse a climas cálidos siempre que cuente con sombra, buena ventilación y agua fresca. En días de calor, evita la exposición al sol en horas pico y ajustar las salidas a momentos más frescos, asegurando sombra y descansos.

Se le considera una de las razas más listas y dispuestas a complacer, lo que facilita el entrenamiento mediante refuerzos positivos. La socialización en sus primeras etapas y la práctica constante en las rutinas de entrenamiento (obediencia básica, interacción con otros caninos y manejo de estímulos) ayudan a mitigar comportamientos no deseados.
Nutrición y vida diaria
Alimentación: Es esencial proporcionar una alimentación balanceada y de buena calidad, adaptada a su edad (cachorro, adulto o anciano) y nivel de actividad. Controlar la cantidad de comida y mantener horarios regulares de alimentación es clave para evitar problemas de peso.
Cuidados diarios: Además del grooming, se sugiere revisar sus oídos y ojos para prevenir infecciones e irritaciones, sobre todo en climas húmedos o en ambientes donde pasa mucho tiempo con aire acondicionado.
Vacunación: mantén al día el calendario de vacunas y desparasitación, y consulta con un veterinario sobre suplementos o cuidados específicos en climas cálidos.
Socialización: El interactuar con diversas personas, sonidos y ambientes para fomentar un carácter equilibrado, especialmente si hay niños pequeños en el hogar.
En resumen, el Bichón Habanero conquista a sus dueños con su amor incondicional y su energía vivaz. Si deseas un compañero que te brinde felicidad, que se adapte a la vida familiar y que te incentive a salir a caminar o jugar, esta raza es la opción perfecta.