En la actualidad, las mujeres desempeñan múltiples roles que enriquecen sus vidas y aportan valor a la sociedad. Uno de estos es el emprendimiento, un sector que cada vez más cobra fuerza y no solo se ha transformado en un factor de cambio y desarrollo socioeconómico, sino también en una oportunidad para crecer profesionalmente y forjar un mejor futuro.
Sin embargo, abrirse camino en el mundo del emprendimiento puede ser un desafío, sobre todo al tratar de mantener un equilibrio saludable entre el espacio personal, familiar y el proyecto, lo cual genera agotamiento, estrés y pérdida de motivación. Por ello, es esencial establecer límites claros y prioridades que permitan una distribución equilibrada del tiempo para garantizar su salud integral y su éxito de la empresa.

No se trata de dividir el tiempo 50/50, sino de integrar ambos aspectos de forma que te sientas pleno y productivo en ambas áreas. En esta oportunidad analizamos algunas estrategias efectivas para ayudarte a encontrar ese equilibrio.
Prioriza y organiza
Define el horario laboral y evita revisar correos o responder llamadas de trabajo fuera de ese horario. Si trabajas desde casa, es importante tener un área dedicada a tus labores.
Aprende a decir “no” y evita comprometerte con proyectos o tareas adicionales que te sobrecarguen.
Clasifica tus tareas por orden de importancia. El método de la matriz de Eisenhower te ayudará a enfocarte en lo que realmente importa, a delegar tareas claves a otros para evitar sobrecargarte de responsabilidades. De esta forma, cada miembro del equipo podrá demostrar sus habilidades y hacer su contribución al desarrollo de la empresa.
Planifica las actividades de la semana personales y laborales con anticipación, lo cual te permite realizarlas de forma correcta, reducir el estrés y la ansiedad, mejorar la gestión del tiempo y fomentar la disciplina.
El autocuidado no es un lujo, es una necesidad. Establece tiempo en tu calendario para hacer ejercicio, meditar, leer o simplemente relajarte.
Recuerda que el equilibrio es un proceso dinámico y lo que funciona hoy puede que no lo haga mañana. Sé flexible y ajústalo según tus necesidades. Lo más importante es que seas intencional en dedicarle tiempo a tu vida personal, porque el éxito profesional no debe ir a gastos de tu bienestar y felicidad.